Los animales están en el bosque aburridos, hasta que un día, un cartel anuncia la apertura de un parque de diversiones. Los animales están entusiasmados por su visita, pero la ciudad no es como lo esperaban.
El sonido del tráfico asusta al puercoespín y todas sus espinas saltan por los aires hasta desinflar los globos de un anuncio. Bip, bip, bip, ¡fuera de aquí! Un cerdo silvestre ve un campo de arena en el parque y salta dentro de él. Bip, bip, bip, ¡fuera de aquí!
Un león hambriento ve un pequeño perro a lo lejos y no puede resistirse…Bip, bip, bip, ¡fuera de aquí!
¿ Podrán divertirse los animales de esta forma?
Los animales son como pequeños niños, que no desean causar problemas pero no pueden esconder su naturaleza. En una ciudad con tantas reglas, ¿las personas podrían tolerar ese comportamiento? Aquello que parece un desastre es en realidad el deseo natural de explorar. ¡Así es la infancia!