El 20 de mayo de 2024, el nuevo presidente electo de Taiwán ha tomado el cargo y es orgullosamente el primer aborigen elegido para el puesto. Pero la atmósfera de celebración comienza a evaporarse cuando, en la medianoche del día 21 de mayo y por razones desconocidas, los ciudadanos de Taiwán y Cuba sufren un intercambio fícisco: los veintitrés millones de habitantes de Taiwán despiertan esa mañana en la isla caribeña, y los once millones de cubanos abren los ojos para encontrarse en la isla frente a China. El intercambio de más de 14 500 kilómetros cambia dramáticamente el orden geopolítico y el destino de las dos naciones rodeadas de agua. Estas dos naciones han aprendido a sobrellevar su destino a lo largo de las décadas, y a pesar de que han intercambiado sus locaciones geográficas, aún se encuentran a la sombra de un gran poder al norte de sus estrechos. ¿Cómo es que el primer presidente indígena de Taiwán, y el primer presidente en ejercer sus funciones fuera de su propio país, se enfrentará a esta situación nunca antes vista? ¿Cómo ayudará este evento en su ya complicada posición en el mundo? ¿Por qué la población sigue aferrada a sus ideas a pesar de enfrentar amenazas diariamente? Además de estar ubicados sobre el trópico de Cáncer, Taiwán y Cuba también comparten una existencia de conflictos políticos extranjeros que crean una melancólica realidad tropical. Quizá el futuro sea el pasado, y el pasado una variación del futuro. Sobre una extraña situación temporal y espacial, esta obra sobrepone diversos recursos estilísticos como la entrevista, reseñas de libros, transcripciones de clubes de lectura y una apabullante narración para llevar la experiencia de lectura al máximo. En ocasiones, la novela nos conduce del futuro cercano al Nuevo Mundo. En otras, del Nuevo Mundo a la infinita historia de las posibilidades. Al final, el lector tendrá presente una sola pregunta: ¿qué significa Taiwán en estos momentos?