Esta historia está inspirada en una experiencia real de la autora. Un buen día, al abrir la ventana de su casa y ver que la montaña de enfrente se había quedado desnuda de la noche a la mañana, se preguntó: ¿realmente necesitamos construir tantas casas? Si yo fuera esa montaña, ¿qué pensaría? Después de que sus ilustraciones fueran seleccionados para ser expuestas en la Feria del libro infantil de Bolonia, decidió completar la historia y crear un libro ilustrado completo. La historia se cuenta en primera persona detallando el estado de ánimo de la montaña y se presenta con un estilo de dibujo a mano fresco e infantil, con una paleta de colores cálidos y suaves y una composición sencilla pero rica en diseño, que rezuma esperanza y vitalidad. Aunque la protección del medio ambiente sea sin duda un tema mucho más complejo a nivel práctico, Chen utiliza una perspectiva singular para transmitir su preocupación por la naturaleza y su visión ideal de una coexistencia armoniosa entre los seres humanos, la naturaleza y los animales. La historia tiene un final abierto: “¿Qué pasará con la montaña?” Eso queda a merced de la imaginación y la interpretación del lector.